lunes, 25 de noviembre de 2013

DECLARACIÓN DE SOS CABALLITO EN REPUDIO AL SHOPPING REPUDIADO POR LOS VECINOS


 

A las Señoras y Señores Legisladores de la Ciudad de Buenos Aires:

Desde SOS Caballito nos dirigimos respetuosamente a ustedes en relación con el tratamiento del Proyecto que se tramita como "Expediente Nº 2513-J-2013 y agregado antecedente 1604-J-2011".

Como organización barrial en defensa de la calidad de vida, expresamos nuestro rechazo al referido Proyecto por las causas que, resumidamente, se enumerarán más abajo. Y solicitamos que la Legislatura se aboque, mediante un trabajo que integre la participación de los vecinos, al análisis de mejores propuestas para los terrenos involucrados.

Al respecto, SOS Caballito pone a su consideración, como ha hecho ante el Consejo Consultivo Comunal de la Comuna 6, lo siguiente:

Es necesario un desarrollo urbano que promueva la mejora del tejido y la integración social, con  planificación y orientación de la localización de inversiones. Creemos necesario que, antes de tomar cualquier decisión sobre el espacio de la ex Playa de Cargas de Caballito y sus alrededores, debería realizarse una evaluación ambiental estratégica, que permita conocer el verdadero impacto urbano que produciría un proyecto como éste en todo el sector de influencia.

¿No hay otra forma de mejorar ese "vacío urbano"? Desde hace años, los vecinos de Caballito reclaman un Proyecto de Ley para crear, sobre el espacio de la ex Playa de Cargas, un Parque Público. Entendemos que el predio en cuestión forma parte del mismo. Por lo tanto, proponemos que:

1.    En primer lugar,  no se apresure el tratamiento de este Proyecto, teniendo en cuenta la importancia del mismo, la sospecha planteada por algunos asesores de la Comisión de Planeamiento Urbano sobre irregularidades en la adquisición del terreno.

2.    Se estudien seriamente los títulos de propiedad y cómo se llegó a ésta cuando la documentación que hemos tenido a la vista indica un cambio de titularidad desde el Estado Nacional a la empresa "Alto Palermo S.A.", sin que haya sido posible encontrar antecedentes de ninguna Ley Nacional que permitiera la enajenación de parte de un terreno público hacia manos privadas. Si ese predio nunca pasó efectivamente a manos privadas, debería evitarse el avance de este Proyecto e investigarse las responsabilidades que correspondan.

3.    Para el supuesto caso de que se pudiera demostrar la legitimidad de la propiedad de los terrenos por parte de "Alto Palermo S.A.", se analice la expropiación del predio involucrado para destinarlo al Parque Público, no mediando pago alguno de dinero, sino a través de otras formas, entre las que podrían pensarse opciones como, por ejemplo, el otorgamiento a la empresa propietaria, en alguna zona de la ciudad aún no densificada y necesitada realmente de emprendimientos edilicios y comerciales que colaboren con su desarrollo, de: i. la capacidad constructiva que posee actualmente el terreno de la Av. Avellaneda, o bien, ii. otro predio, con las normas urbanísticas especiales indicadas en el proyecto de ley.

4.    El terreno que así se recuperaría para el estado debería ser incorporado al proyecto del Parque, que desde hace años es recomendado por esta misma Legislatura y que conserva vigencia, aunque reducida en un 20%, en el proyecto ganador del Concurso para el Plan Maestro de la Playa de Cargas de Caballito. Ese espacio podría recibir equipamiento público necesario en la zona y aportar una importante superficie que podría colaborar en mejoras imprescindibles para la conectividad Norte Sur, dificultada por  el Ferrocarril Sarmiento que marca un corte entre ambos sectores. El Parque, ubicado sobre su traza y en el centro geométrico de la ciudad, aportaría un recorte en la trama construida remedando la naturaleza que Buenos Aires se empeña en olvidar.

Ese Parque atendería la necesidad básica de la ciudad de ampliar sus espacios verdes, escasos ante lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Convertir una zona degradada en un parque de uso público acorde con el desarrollo de la Ciudad a su alrededor, creará un "ombligo" forestado, un pulmón necesario en una zona donde la relación entre espacios verdes y habitantes es grave por lo ínfima.

 

Es la última oportunidad de hacerlo en el barrio y una de las pocas en la Ciudad. Su creación debe incluir la revisión de los Distritos Urbanísticos a su alrededor para evitar que siga superpoblándose Caballito y que el parque se convierta en un jardín privado para grandes edificios que podrían construirse alrededor, dejándolo a su sombra. Entonces, parte de lo necesario para Parque, no debe entregarse a la especulación inmobiliaria, negocio de unos pocos que tanto daño ha hecho.

 

Volviendo al Expediente Nº 2513-J-2013 y agregado antecedente 1604-J-2011,  nuestra oposición se basa, entre otras cuestiones, en lo siguiente: 

 

a.    Cabe la posibilidad de que la pertenencia de esos terrenos a "Alto Palermo S.A." no sea legal.

b.    La presentación está mal encuadrada en los términos del Código de Planeamiento Urbano. El PE envía este proyecto a la Legislatura atendiendo lo indicado por la Sección 9 de dicho Código. La misma el establece el derecho de vecinos, grupos de personas y entidades intermedias a presentar propuestas de modificación de dicho Código en función de resolver inconvenientes originados por las normas vigentes, a través del dictado de Normas Urbanísticas Especiales. El grupo de solicitantes deberá ser dueño de la mitad de la manzana involucrada y adjuntar la opinión certificada de los demás propietarios. La norma está claramente pensada para iniciativas de grupos de vecinos, organizados o no en instituciones intermedias, y no para un propietario único de una gran superficie.

Se da por supuesto que los terrenos involucrados pertenecen a una empresa y allí, de acuerdo con la normativa actual, R2a2, se pueden construir viviendas y comercios, sin "inconvenientes" pero se ha abandonado el predio durante años, al igual que gran parte de las manzanas que lo enfrentan, a la espera de un negocio mucho mayor, que la norma no contempla, y por eso se pretende su modificación.

El Proyecto de Ley debería ser rechazado, atendiendo a lo estipulado por el Código y por un básico criterio democrático. Una modificación urbanística no puede hacerse atendiendo sólo a intereses económicos de una empresa y de sus amigos.

c.     Sin la pretensión de reiterar aquí los argumentos que se plantearon en las reuniones de diputados y asesores, cabe recordar que Caballito, con una superficie cercana a los 7km2 (700ha) y una población de casi 180.000 personas duplica al promedio de la ciudad.

En los últimos años, se han construido en el barrio casi 3.000.000 de m2, generando una densidad edilicia fenomenal, a pesar de la existencia de algunas zonas en que la legislación impide que avance ese abuso constructivo. La falta de crecimiento poblacional en el barrio no hace más que alertar sobre el origen especulativo de muchas de esas obras.

d.    Por otra parte, en los cálculos más optimistas, en Caballito se han estimado a lo sumo 1,5m2 de espacios verdes por habitante, mientras diferentes institutos ambientalistas y de salud recomiendan una relación de 10m2 verdes por habitante. Los barrios que lo rodean, Flores, Villa Crespo, Almagro, Boedo, tienen similares o peores índices.

e.    Dada su cantidad de habitantes, Caballito conforma la Comuna 6 en sí mismo. Sólo los barrios de Recoleta y Palermo repiten esta situación, pero son indudables las diferencias de superficie que ocupan y de espacios verdes y la innegable ventaja ambiental de su cercanía al Río de la Plata.

f.     Debería considerarse si es necesario, y hasta posible, seguir admitiendo construcciones de gran escala y promoviendo actividades de gran afluencia de público en este barrio, cuando hay varios otros que necesitan de una verdadera promoción del desarrollo edilicio y poblacional.

g.    Un edificio de educación inicial de 800m2 y una incomprobable promesa de trabajo para vecinos de la zona, que se agregaron como paliativo al final de la reunión de diputados, no son solución para los problemas que se expresaron. En todo caso, suenan a reconocimiento de culpas.

Nos permitimos llamar su atención y solicitar una amplia reflexión sobre este asunto, tan delicado desde muchos puntos de vista, antes de dar lugar a una modificación al Código de Planeamiento Urbano de alto impacto sobre la Ciudad, el barrio y sus posibilidades de mejorar su calidad de vida.

Rodolfo Fernández

SOS Caballito


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